Mira, la prostitución es honesta - pagas, obtienes lo que necesitas, y cada quien sigue su camino. Sin mentiras, sin promesas falsas, sin "hasta que la muerte nos separe". Es una transacción limpia donde ambas partes saben exactamente qué están intercambiando.
El matrimonio, por otro lado, es la estafa más elaborada que existe . Te venden la fantasía del "amor eterno" cuando en realidad es un contrato económico disfrazado de romance.
La diferencia es que en el matrimonio pagas con tu libertad , tu tiempo , tu dinero Y tu cordura durante décadas. Y cuando se acaba - porque TODO se acaba - te quedas con la mitad de todo si tienes suerte.
No te pide que conozcas a su familia, no te reclama por llegar tarde, y definitivamente no se queda con tu casa cuando decide que ya no le sirves.
El matrimonio es prostitución con extra pasos y sin honestidad. Por lo menos las trabajadoras sexuales respetan el valor de su tiempo y el tuyo.
La sociedad condena a las prostitutas por ser "inmorales" mientras aplaude matrimonios vacíos basados en conveniencia económica. Hipocresía pura.